miércoles, 26 de agosto de 2020

Opinión: Aparición de "etnógrafos" que sentencian a Yaku Pérez.


Ahora, han aparecido un poco de "etnógrafos", que sentencian: Yaku Pérez no es indígena", ¿Porqué no dijeron eso cuándo fue electo en 2013 y reelecto en 2017 como presidente de la ECUARUNARI?, o, ¿porqué no saltaron con el genoma en la mano, cuando fue electo presidente y coordinador de la Coordinadora Andina de Organizaciones Indígenas? Otros dicen: "Yaku no se llama Yaku, se llama Carlos", cuando es un derecho de todas y de todos, llamarnos como nos sintamos mejor identificados.

Otros dicen que es aliado del banquero Lasso, porque, en una declaración dijo que "Es preferible que gobierne un banquero, antes que el correismo" y la historia ha dado la razón: El candidato de la mal llamada "revolución ciudadana" es el miserable que está vendiendo el país al peso al FMI, que quiere privatizar y las áreas estratégicas y elimina los derechos de los trabajadores.

El banquero - si, mañosa y oportunistamente, pero obligado-- tuvo que adquirir compromisos con los sectores populares, a ofrecer cosas como el libre ingreso a la Universidad, mientras el títere de Correa, venía con la misma prepotencia que su jefe.

Orgullosos estaban cuando "un indígena ganó la Prefectura en una provincia como Azuay o una ciudad como Cuenca", se encrestaban al defender, en medio de la pandemia, la gestión de Pérez, que es totalmente distinta a la de otros prefectos que han brillado por su ausencia o se han dedicado a robar.

Sacaban pecho cuando Yaku sanitizaba sectores, entregaba kits, apoyaba a los pequeños productores, mandaba ayuda a Guayas, hacia intercambios con Esmeraldas. Esto, hasta hizo que se contagie de covid-19, de verdad y no como sainete.

Hay audaces que, hasta dicen que nunca ha luchado, que, en el Levantamiento indígena-popular de octubre, hasta se opuso a la pelea. Y, esto no es más que una bajeza, porque, también, muchos estuvieron contentos cuando la ECUARUNARI levantó dos o tres caminatas por el agua, en todo el país, contra la minería a gran escala en la época de Correa, todos denunciamos cuando, en uno de los paros del Pueblo fue agredido y detenido, cuando detuvieron y de portaron a su compa Manuela, cuando casi le matan en Río Blanco. Y todos hemos visto la lucha antiminera que se levanta en Azuay, aunque ya tres veces la Corte Constitucional niega el pedido de Consulta.

Entonces, detrás de estas acusaciones no hay ni defensores de los indígenas frente a un "mestizo disfrazado" , ni izquierdistas contra pactos con la derecha, ni luchadores sociales que se sienten utilizados.

Aquí, lo que hay, son sectores de la propia derecha que - aprovechándose de los límites de la democracia burguesa, de las propias críticas y desencuentros que, como en cualquier lado hay, existe entre nuestros compañeros del movimiento indígena, de las aspiraciones justas de dirigentes destacados y de sus bases- quieren debilitar el proyecto unitario que le ha costado, incluso vidas, a nuestros pueblos.

Si, como han dicho los dirigentes de la CONAIE, hay muchas cosas que mejorar, corregir y, hasta de plano, rechazar, como, por ejemplo, la cuasi vicepresidenta que, por suerte, se fue a tiempo por lo que ella mismo calificó como "visiones contrarias con el movimiento indígena".

Si, hay derecho a no estar de acuerdo, pero, frente a la ofensiva neoliberal, ante los intentos de los correistas de pretender volver como "salvadores", ¿A quién le interesa que el movimiento indígena y el pueblo aparezca dividido?

Digan lo que quieran, personalmente, yo lo conocí peleando y, eso es lo que le he visto y hacer todo este tiempo, voten, si quieren por el títere de Correa, por el banquero del feriado bancario, no voten, también, y esperarán sentados a que, por su ausencia, se caiga el sistema capitalista o la democracia burguesa. Pero, para cambiar la sociedad, para hacer una verdadera revolución, hay que aprovechar cualquier resquicio y recurrir a todas las formas de lucha y espacios que sean posibles.

Pero, sobretodo, lograr que las masas populares sepan que son los pueblos los que hacen su historia, no los caudillos, y, también, tejer lazos de unidad, duradera si, pero, también, para enfrentar estas urgencias. Yo apoyo a Yaku Pérez Guartambel

Por: RICCARDO NARANJO.

viernes, 14 de agosto de 2020

CONAICE EN CONTRA DE RESOLUCIONES ADOPTADAS POR LA CONAIE.


Santo Domingo de los Tsachilas
. - La reunión del Consejo ampliado de la CONAIE ha traído diferentes reacciones incluso de las organizaciones regionales que participaron de esta cita.

Javier Aguavil presidente de la Confederación de Nacionalidades y Pueblos Indígenas de la Costa Ecuatoriana (Conaice) comenta que todos los procesos se han venido dando con transparencia, incluso el de Pachakutik ya que a la interna tienen un régimen orgánico y dentro de ello y de la autonomía se elegirá al representante que participará como precandidato para la presidencia de la República.

“Por nuestra parte vemos con preocupación este tipo de actitud que han adoptado algunos dirigentes que se toman el nombre de las bases para dar su opinión personal, hemos venido dando seguimiento todo el proceso. Como Conaice podemos garantizar que hemos venido realizando un trabajo coordinado y esperamos que se den los procesos como están en el calendario electoral” aclaró.

En cuanto al enunciado de la resolución donde se menciona que se aplicará justicia indígena a la Coordinación nacional y los coordinadores regionales del movimiento Pachakutik indicó que se deben fundamentar en bases legales para poder establecer sanciones ya que la decisión adoptada por este movimiento se fundamenta en el régimen orgánico.

Aguavil calificó como legítimo el proceso llevado a cabo a la interna del movimiento Pachakutik ya que está amparado en el proceso organizativo de cada estructura y que en el caso de haber inconformidades se deben emitir de manera escrita a cada una de las organizaciones para su debido análisis.

La ausencia de la firma de su como presidente de la Confederación de Nacionalidades y Pueblos Indígenas de la Costa Ecuatoriana las resoluciones a decir de sus palabras se debe a que “están fuera del término y por ello no firmamos” aclaró.